En el discurso de investidura de la próxima Presidenta de la Junta de Andalucía, la palabra EDUCACIÓN ha aparecido tan solo 4 veces, frente a las 10 de la palabra ECONOMÍA.
De las 33 páginas de su discurso, sólamente encontramos un párrafo donde se plantea un compromiso, eso sí, muy genérico, que es el siguiente:
Paralelamente, la apuesta por la educación es la mejor estrategia para hacer frente a las desigualdades, para conseguir una sociedad cada vez más igualitaria y más justa y donde la igualdad de oportunidades sea clave como catalizadora del desarrollo económico.
No hay ni un solo compromiso concreto para educación, en cambio si hay al menos 6 compromisos claros y concretos sobre economía.
¿Será esto un indicador de las nuevas políticas educativas? Porque su discurso da mucho que pensar.