Ocurrió en la hora del recreo. Se cayó el techo del aula mientras alumnas y alumnos jugaban en el patio; ¿qué hubiera pasado si hubieran estado dentro? Ayer pasamos rozando la tragedia en el C.E.I.P. Ana Josefa Mateo de El Cuervo (Sevilla) y, aunque la Consejería de Educación estaba advertida, no hizo nada.
Las reiteradas denuncias de las AMPAs y de las directivas de los centros de El Cuervo forzaron una visita a principios de curso en la que los técnicos de la Junta identificaron serios problemas y definieron prioridades de intervención sin que después se hiciera nada. Incluso se negaron a instalar sistemas de climatización en el centro alegando que las instalaciones estaban obsoletas. La incomparecencia de la Consejería de Educación ante casos tan graves solo puede calificarse de negligencia: ¡Ya basta de ocultarse y mirar para otro lado!
Esta mañana, el alumnado y sus familias junto al profesorado del Centro se han concentrado ante las puertas del colegio para protestar, negándose a entrar a las aulas. Mientras las autoridades han seguido presionando al profesorado para que siguiera jugándose la vida bajo los techos deteriorados tras años de abandono y ninguneo. ¡Ya está bien!
USTEA ya denunció esta situación a principio de curso y seguirá apoyando a la comunidad educativa en su defensa de la vida frente al abandono irresponsable de las autoridades. El lunes volveremos a acompañar las movilizaciones y nos personaremos a las puertas del CEIP Ana Josefa Mateo de El Cuervo de Sevilla, para manifestar nuestra solidaridad.
¿Para cuándo la próxima tragedia? ¿Hasta cuándo tendremos que soportar la falta de sensibilidad y de responsabilidad de las autoridades de la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía?
