Desde la Confederación Intersindical queremos mostrar nuestro apoyo a las tres compañeras que están en huelga de hambre para luchar contra el abuso de temporalidad al que están sometidos más de 800.000 personas empleadas en el sistema público, cuyo trabajo, después de décadas de experiencia en pro de este sistema, depende de aprobar unos procesos selectivos mal llamados de consolidación contrarios al Derecho Europeo, y cuyas directivas exigen al estado Español que imponga una sanción al abuso, que en la actualidad no existe, propiciando el despido libre y gratuito de trabajadoras y trabajadores con una edad media de 50 años, en su mayoría mujeres, con cargas familiares y en riesgo de exclusión laboral, por todas las Administraciones del Estado.
Esta situación, se ve agravada por la pandemia en la que el personal empleado público ha demostrado sobradamente estar a la altura con profesionalidad, más allá de sus propios deberes, manteniendo los servicios públicos básicos para el mantenimiento del Estado del Bienestar. A pesar de la grave situación sanitaria, el Ministerio de Función Pública y las administraciones autonómicas y locales de los distintos territorios se apresuran a convocar procesos selectivos de afluencia masiva, instigados por los sindicatos institucionales CCOO, UGT y CSIF, que prefieren eliminar el problema antes que proteger el derecho de los trabajadores más precarios de la Administración.
Estas compañeras tienen nombre y apellidos, tienen una vida y una trayectoria profesional que las avala en sus reivindicaciones.
Estas compañeras son María Jesús Casado, funcionaria de carrera en GVA, trabaja en haciendo como administrativa, se encuentra en huelga de hambre desde el día 6 de abril. Irune Saiz, Trabajadora social en el Ayto de Bilbao, donde lleva trabajando desde hace 13 años, comenzó su huelga de hambre el 17 de abril y Coro Alonso que lleva trabajando 14 años en el Gobierno Vasco como cocinera, comenzó su huelga de hambre el día 10 de abril.
Estas tres valientes mujeres, han visto que es lo que les queda por hacer después de años de lucha y de petición de estabilidad en su puesto. Después de tantos años han demostrado con creces su capacidad y mérito para estar en los puestos de trabajo que desarrollan. Han denunciado, han llegado a los tribunales pero a pesar de sentencias favorables que vienen desde Europa, España hace oídos sordos y no hace nada por estabilizar al colectivo de profesionales que se encuentran en abuso de temporalidad en las administraciones públicas.
Una huelga de hambre puede parecer excesivo, pero cuando llevas mas de 10 años trabajando para la administración, cuando ves que no se soluciona una situación precaria, cuando ves que el futuro laboral está pendiente de un hilo, la desesperación puede llevar a medidas rotundas.
El hecho de que la administración esté feminizada también tiene que ver con la dejadez para la solución del problema, es un hecho que las profesiones más feminizadas son las que tienen peores condiciones y más precarias. Hoy por hoy entre la temporalidad, y las ofertas masivas de empleo que ha decidido la administración junto con las grandes centrales sindicales está dejando fuera del mercado laboral a un gran número de mujeres que se encuentran a las puertas de perder su puesto de trabajo, muchas de ellas con cargas familiares. ¿Se sigue sin entender una huelga de hambre?
Desde la Confederación Intersindical mostramos todo nuestro apoyo a estas compañeras, luchadoras y valientes, y desde nuestra posición, como sindicato de clase, seguiremos en primera línea en la reivindicación de estabilidad para todo este colectivo en situación de abuso de temporalidad y pidiendo la Fijeza Ya.
Secretariado Confederal | 5 de mayo de 2021