SEVILLA, 23 Nov. (EUROPA PRESS)
El colectivo de docentes interinos que protagonizaron un encierro en las dependencias del Ayuntamiento de la capital hispalense ha protagonizado este miércoles, a las puertas de la Delegación Territorial de Educación de la Junta en Sevilla, la primera de una serie de ‘miniconcentraciones’ semanales que se mantendrán hasta principios de enero en defensa de la educación pública, pidiendo una inversión “real” en los presupuestos de la materia y la derogación de la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Así lo ha asegurado a Europa Press el portavoz del colectivo, Alejandro Matías, que también ha incidido en la celebración de una manifestación que tendría lugar el próximo 17 de diciembre y que cuenta con el apoyo de USTEA, CGT, CSIF, Confedampa, Marea Verde, Sindicato de Estudiantes, Docentes en Acción o Padei.
Las reivindicaciones concretas del colectivo, que no ceja en su intención de reunirse con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, pasan por reclamar que no se produzcan más cierres de las líneas de Infantil y Primaria, que no siga aumentando el número de conciertos educativos y en su lugar se destinen más fondos a la educación pública, una “correcta” implantación del Francés y que “se diga la verdad a la ciudadanía respecto a esos mil docentes de Primaria que se han quedado en la calle y no 400, como comentó la consejera”. Los interinos, durante su encierro, apuntaban también al “colapso” de las bolsas de trabajo, fundamentalmente en Infantil, Primaria y Educación Física, lo que “está dejando a los interinos sin trabajo y a los aspirantes sin su primera oportunidad de trabajo”; y a la falta de maestros en las escuelas, pues no se realiza la cobertura inmediata y correcta de las bajas, dejando semanas a los niños sin docentes y perdiendo la figura del profesor de apoyo, con el que se cubren dichas bajas. La situación, agregan, está agravada por otros recortes “encubiertos” que dejan a las escuelas sin los apoyos para el alumnado con necesidades educativas especiales, aulas con más de 25 alumnos o cierre de aulas en la pública y mantenimiento de la concertada, “entre otras muchas cuestiones”.
“Exigimos a la Junta que respete nuestro trabajo, apueste por la estabilidad laboral del colectivo que nos permita desarrollarnos profesionalmente en los centros andaluces y que deje de utilizar a la educación como moneda de cambio del ajuste presupuestario”, apostillan.